Hoy, 8 de Marzo, se celebra el Día Internacional de la Mujer. Un día en el que se conmemora el esfuerzo y el duro camino que las mujeres de todos los rincones del mundo han recorrido durante siglos y que, todavía hoy en día, algunos pretenden alejar la meta de estas luchadoras.
Y, antes de que puedas si quiera pensarlo, no, no hace falta un día internacional del hombre. El hombre ya se ha encargado a lo largo de la historia de menospreciar el papel de la mujer para mantenerse en lo alto de la pirámide, bien por simple desprecio y considerarlas inferiores o bien por miedo a que éstas les superasen en habilidades, conocimientos,… que es por la opción que yo me decanto. Valiente Nueva Zelanda, que fue el primer país del mundo que permitió votar a las mujeres en 1893.
Hoy se celebra el papel de la mujer en la sociedad, sí; pero el resto de los 364 días del año también. Porque aunque le pese a algunos, la mujer es uno de los pilares fundamentales de la sociedad. Hoy se reivindica una igualdad real de derechos, oportunidades, justicia, paz y desarrollo porque, pese a lo que algunos piensan, ser feminista no quiere decir que se quiera poner a la mujer por encima del hombre como si lo hace el machismo, que quiere poner el papel del hombre por encima del de la mujer. El movimiento feminista busca poner en igualdad de condiciones a todas las personas, sean del sexo que sean, y es esta la cualidad que hace que las mujeres sean generosas y no egoístas: buscan igualdad, no superioridad.
Hoy también nos acordamos de esas 1.082 víctimas mortales por Violencia de Género desde el 1 de enero de 2003 hasta el día de hoy, 4 de ellas en lo que llevamos de año, que ya no podrán abrazar a sus familias, que se les negó la oportunidad de ser quienes querían y de hacer lo que querían, porque un hombre decidió que eran suyas y de nadie más.
Porque estamos en 2021, y todavía la mujer tiene que aguantar que el hombre la menosprecie, como pasó el pasado sábado durante la 35ª Edición de la Gala de los Goya, en la que se escuchaba tildar de “putones” y criticar el físico de las mujeres en la alfombra roja, a varios periodistas y cámaras.
Maldito ese “Techo de Cristal” y maldito su arquitecto y constructor. Esos que decidieron que por ser mujer tu sitio era estar abajo. Lo que no sabían, es que en toda construcción hay una salida y otras tantas de emergencia, que harían que valientes como la española Clara Campoamor, las estadounidenses Elizabeth Cady Stanton y Lucretia Mott, la ceilandesa Radhika Coomaraswamy y otras muchas mujeres valientes, guiarían a la sociedad hacia un contexto más justo e igualitario y dejarían ver que ese mundo de hombres no era más una ilusión de ellos mismos.
Hoy es un día para estar orgullosos, más si cabe, de las mujeres que hay en nuestras vidas. Madres, Tías, Abuelas, Hermanas, Primas,… orgullosos por su fuerza y su valentía, por no tirar la toalla cuando se han encontrado una pared en su camino, por seguir sonriendo aun cuando el mundo les ha dado la espalda, por esto y mucho más.
Desde SUSTENTEARTH siempre estaremos a favor de la igualdad entre mujeres y hombres, y defenderemos sus derechos y oportunidades. El feminismo no es solo un movimiento, es el camino.
Feliz 8 de Marzo a todas las valientes, en especial, a mis valientes.